Después de un 2017 para el olvido, Angelique Kerber volvió a recuperar ese juego que la llevó a ser número 1 del mundo, y celebró su primer título en dieciséis meses: la alemana se coronó campeona en el WTA de Sídney.
La nacida en Bremen se mostró superior y aprovechó los momentos de tensión del encuentro, para superar a Ashleigh Barty por 6-4, 6-4 en una hora y 11 minutos de juego. “Estoy jugando un tenis fantástico y de nuevo me siento muy bien. Ganar mi primer título en mi primer torneo del año es increíble”, expresó Kerber tras el título, que además añadió. “Tuve una gran semana y aunque la final no fue fácil, pude sacar diferencia en momento importantes”.
De esta manera, la jugadora de 29 años, ganó el título número 11 de su carrera y primera desde el Us Open 2016.
Cabe resaltar que en el otro torneo de la semana, Elise Mertnes volvió a demostrar que el inicio de año le sienta bien: en el WTA de Hobart, la belga repitió el título, tras superar a la rumana Mihaela Buzarnescu en tres sets (6-1, 4-6, 6-3).
Redacción Match Tenis
