Un nivel bastante alto fue el que exhibió el tenista Roger Federer en su debut en el Abierto de Australia. Tras guiar a Suiza dos semanas atrás a la consecución de su tercera Copa Hopman, ‘Su Majestad’ regresó a la acción y sorprendió por la forma en que resolvió el partido ante el esloveno Aljaz Bedene en apenas una hora y 39 minutos de juego. Los parciales con los que Roger empezó la defensa de su título fueron 6-3, 6-4 y 6-3.
Doce saques directos y el 78 por ciento de los puntos ganados con su primer servicio (45 de 58), se convirtieron en las principales armas del helvético en su debut. “Creo que la pista está igual que el año pasado. Durante la noche suele estar más lenta, pero la sentí rápida. Ambos intentamos jugar delante para acomodarnos a nuestros golpes”, expresó Roger Federer tras la culminación del partido. El próximo oponente del segundo sembrado será el alemán Jan-Lennard Struff, a quien superó en el único enfrentamiento que han tenido, en Halle, Alemania en 2016.
“El año pasado fue un cuento de hadas. Y el año pasado fue el año pasado. Ese es el problema. El año pasado, siempre estará ahí, es el año favorito de mi carrera. Así que este año solo espero mantenerme saludable, darme oportunidades y con suerte estar en esos grandes partidos como el año pasado para poder jugar lo mejor posible y divertirme frente a una gran multitud, mantenerme trabajando duro y viendo lo que sucede al final”, complementó Roger.
El suizo también tuvo tiempo para ponderar el regreso de Novak Djokovic, a quien comparó con él mismo o Rafa Nadal, al momento de volver. “Los regresos no son fáciles, pero quizás Djokovic, Nadal o yo mismo, tenemos margen contra otros jugadores. Cuando regresamos, podemos encontrar ese nivel. A pesar de no encontramos muy bien de sensaciones. Aún podemos encontrar la manera, mientras otros deberán de luchar desde el principio”.
Redacción Match Tenis
