En una final con un matiz cambiante y que se definió en 1 hora 46 minutos, la rumana Mónica Niculescu logró más solidez y venció a su rival Alizé Cornet para conseguir un nuevo trofeo en su palmarés luego de más de un año.
Mónica Niculescu encontró en Asia un gran motivo para volver a sonreír. La nacida en Bucarest eliminó a Alizé Cornet 6-4, 6-0 y se quedó con el título del WTA International de Guangzhou, en lo que fue una final demasiado inestable que parecía nunca encontrar una dominadora constante. Prueba de ello fueron los cinco quiebres que sucedieron en la primera manga y que dejaron en el aire el destino del partido, que parecía una ruleta rusa: luego de dos breaks por lado, la rumana aprovechó uno de dos set points que tuvo cuando la francesa sacaba 4-5 y así, meterse al bolsillo el parcial. En el siguiente, todo fue a pedir de boca para Niculescu que aprovechó la decaída física de Cornet, que se vio sin energía, afectada por el calor y con signos de cansancio. Un 6-0 fue el resultado en el segundo set que desató la alegría de Mónica, de 26 años.
Con la corona en Guangzhou, China, Niculescu alcanza el segundo título en su carrera después de 1 año y poco más de 6 meses: su bautizo como campeona había sido en el Torneo de Florianópolis 2013 venciendo a la rusa Olga Puchkova. Además se hará dueña de 280 puntos en el ranking y más de $111.000 dólares en efectivo. Por su parte, Alizé Cornet se quedó con las ganas de alzar su quinto trofeo, el segundo del año (ganó Katowice en abril); y ya registra dos finales perdidas en la presente temporada, sumándole la caída en Dubái ante Venus Williams.
Como dato adicional, vale mencionar que el WTA de Guangzhou ha tenido 11 campeonas diferentes desde su estreno en 2004: Li (2004), Zi (2005), Chakvetadze (2006), Razzano (2007), Zvonareva (2008), Peer (2009), Groth (2010), Scheepers (2011), Hsieh (2012), Zhang (2013) y Niculescu (2014).