El colombiano Santiago Giraldo demostró porque es la raqueta número uno del país y el mejor jugador de la historia. Ante Chile, dejó atrás esa inestabilidad que lo caracterizó en este último tiempo y con orden, determinación y humildad se convirtió en una pieza fundamental para llevar a Colombia por quinta vez al repechaje para ascender al grupo mundial.
“Tengo gratitud por haber ganado jugando, luchando y dejando en cancha hasta la última gota de sudor”, comentó el pereirano. “Me voy con la frente en alto. Entre todos nos apoyamos y logramos sacar esta serie adelante y eso nos llena de felicidad”. Además, recordó el episodio sucedió hace nueve meses en Iquique. “Fue una revancha deportiva, aunque esa vez nos hayan ganado de manera injusta. Hoy quedó claro que somos un equipo de caballeros, deportistas y seres humanos que entregan todo por su país”.
El exnúmero 28 del mundo, quien fue el gran gestor de la primera victoria ante Chile en la historia de la Copa Davis, también destacó que la vida siempre te da revancha. “Estaba tranquilo y la vida no solo me ha dado una segunda oportunidad, sino una tercera, cuarta y hasta una quinta y solo por estar buscando siempre mejorar”. Asimismo, resaltó a sus rivales chilenos. “Chile fue un rival muy duro y estos dos chicos son dos de las mayores promesas latinoamericanas”.
El tenista de 29 años, no solo le dio la victoria al país, sino que también se convirtió en el jugador con más alegrías con un total de 25, superando al histórico Jairo Velasco. “Es una gran motivación representar a mi país y llevo 25 victorias en 25 series y once años poniéndome la camiseta, ganando y perdiendo, pero sobretodo dejando mi máximo esfuerzo en cancha y superar a Velasco que era un legendario es algo mágico”.
Finalmente, Giraldo expresó palabras de satisfacción por el alto nivel que demostró y la frialdad que tuvo en los momentos más complicados de la serie. “Esta serie fue muy especial. Jugué un muy buen nivel tenis. Estoy orgulloso del trabajo que vengo haciendo y tengo que seguir en ese camino porque yo sé que mis problemas no son por tenis ni por físico”.
De esta forma, el tenista colombiano pasó de ser el villano hace nueve meses en Iquique a convertirse en héroe. El deporte, así como castiga, premia y esta vez Santiago puede sentirse tranquilo y no por el resultado, sino porque demostró en cancha con hechos cuanto le importa el seleccionado nacional de tenis.
Redacción Match Tenis
