El paso del tiempo no perdona ni siquiera a las grandes leyendas del deporte. Serena Williams, lider del escalafón femenino desde el 18 de febrero de 2013, ha perdido la final de Roland Garros ante Garbiñe Muguruza (5-7, 4-6) y ha dejado claro que su imperio, ese que ha forjado con números arrolladores, podría estar llegando a su fin, sino logra darle un nuevo impulso a su carrera.
La jugadora que cumplirá 35 años en el mes de septiembre, acumula tres torneos ‘Major’ sin levantar la corona hecho que crea dudas sobre su hegemonía. Wimbledon 2015 (venció a Muguruza), fue donde cosechó la última gran alegría. Sin embargo, a partir de allí su tenis y su cabeza no han andado de la mano en las grandes citas, lugar donde busca alcanzar el histórico registro de Steffy Graf de 22 coronas de Grand Slam.
Al Us Open 2015, llegaba con la ilusión de ganar su cuarto Grand Slam consecutivo y 22° de su carrera, pero una sospresiva Roberta Vinci pudo vencerla en semifinales y con ello inició el declive de la hermana menor de las Williams en los eventos mangnos del tenis. Esta derrota causó un golpe tan fuerte en Serena, que decidió desistir de jugar el resto de calendario de la temporada 2015.
El largo descanso terminó en el Abierto de Australia, torneo en el que fracasó en el encuentro final. Esa vez la antagonista de su película dorada fue Angelique Kerber, jugadora que nunca había jugado una final de Grand Slam. Finalmente, en Roland Garros, Garbiñe Muguruza le propinó otro golpe letal al derrotarla en el encuentro decisivo y así logró que la estadounidense por primera vez en su carrera perdiera dos finales de torneos ‘Major’ de manera consecutiva.
Serena Williams no pasa por mejor momento. A sus 34 años, jugadoras que antes no le causaban el más mínimo peligro han comenzado a ponerla en aprietos y otras a derrotarla. La confianza, ítem fundamental en este deporte, ha empezado a desaparecer y todo esto la ha llevado a perder la sana costumbre de ganar títulos importantes. Su leyenda que inició desde que retornó al número uno del mundo (195 victorias – 17 derrotas, 6 Grand Slam – 13 disputados, 23 títulos WTA – 33 torneos jugados) la respaldará de cara al futuro, pero sino logra recuperar rápidamente su verdadero nivel, el fin de su era muy pronto llegará a su fin.
Redacción Match Tenis
