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EL ‘GURÚ’ QUE TIENE JODIDO A SANTIAGO GIRALDO

por Andrés Peraza
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Panorama desalentador para el colombiano Santiago Giraldo en lo que se refiere al ámbito deportivo: derrota tras derrota se ha vuelto el común denominador del mejor jugador colombiano de la historia en cuanto a ranking, que desde hace un tiempo perdió el rumbo y se refugió en un dogma llamado ‘amor y paz’, que es dirigido por su precursor Pepe Imaz, para intentar sacar a flote una carrera que viene en picada.

Justamente esa doctrina implementada por Pepe Imaz, un extenista que llegó a ser 176 del mundo en individuales, campeón de España en la modalidad de dobles y que obtuvo en la segunda ronda de Roland Garros en 1998  su mejor resultado profesional, se basa en el amor y a través de éste, lograr alcanzar la verdadera felicidad y por ende, el éxito.

Al entrar a la web del ‘gurú o asesor español, que debió abandonar el tenis por el sufrimiento que le generaba el ‘ansia de ganar’ y por sentirse alejado del reconocimiento de los demás, generando una bulimia que por poco le quita la vida, nos damos cuenta que su filosofía es armónica y moralista, y su entrenamiento radica en que cada persona, en este caso, jugador,  logre sentirse a gusto consigo mismo, sin preponderar los resultados que alcance. Es decir, lo más importante para el extenista riojano y ahora asesor ‘espiritual’, es que el ser logre estar en plenitud.

Palabras como ‘Divino, maravilloso, evolución, crecimiento, amor, éxito, paz y tranquilidad, abundan en su portal en internet y nos trasladan a un esquema en el que todo indica que la competitividad queda de lado, y que lo realmente valioso es la felicidad como persona, no como jugador.

Los tenistas de alto rendimiento como Santiago Giraldo conviven con buenos y malos días, con victorias y derrotas, alegrías y tristezas, que los llevan a sacrificar muchas cosas en busca de lograr los objetivos que se plantearon el día que eligieron una vida ligada al deporte, pero bajo este sistema, eso queda de lado y con frases de Imaz como «Un partido no se gana ni se pierde… ¡se juega!», queda claro que lo anterior ha pasado a un segundo lugar y se prepondera cuestiones personales.

En el caso del nacido en Pereira, hace un tiempo se le nota muy relajado, paciente y en una tónica de pasividad total, en la que gane o pierda, siempre expresa que está feliz y que siente que está jugando el mejor tenis de su carrera, así los resultados y el ranking digan lo contrario. En cierta manera puede ser cierto que se encuentre feliz y que ese sufrimiento que expresaba en cada partido sea parte del pasado, pero que esté jugando el mejor tenis de su carrera, eso no me lo creo…

Giraldo al igual que Djokovic, otro tenista que es asesorado por este guía espiritual y que tantas dudas ha dejado en el último año por sus pobres resultados, olvidaron como alcanzaron el éxito, perdieron el ADN de un jugador de alto rendimiento que se resume en ser un gladiador, en dar siempre un extra. Sin luchar, sin sufrir, sin exigirse y sin brío quieren obtener su mejor versión y seguramente no la van a lograr porque un campeón lo deja absolutamente todo en la cancha. ¿O se imaginan una victoria de Rafael Nadal sin sufrimiento?

Pepe Imaz y su escuela en Marbella están formando mejores personas, pero no mejores competidores. El tiempo se encargará de dar fe a su doctrina o desvirtuarla, pero por el momento la carrera de algunos de sus pupilos van de capa caída e Imaz con su ‘amor y paz’ tiene en una encrucijada a varios tenistas. 

[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/853628771626340353/1bmEkJa7.jpg» ]ANDRÉS VARGAS PERAZA: @andresvarperaza. Periodista especializado en tenis. Exjugador de tenis con puntuación ITF. Miro el deporte desde una perspectiva diferente. Estuve en el lugar del deportista, ahora del periodista. Director y editor del portal www.matchtenis.com.[/author]

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