Era un día histórico por donde se lo viera. Para Dimitrov, porque era el primer búlgaro en acceder a la final de la Copa de Maestros; Goffin, por su parte, llegaba con el aliciente de haber vencido a los dos mejores del ranking en cinco días y, al igual que su rival, era el primero de su país (Bélgica) en meterse a la final. Para la ATP también era un día importante: se jugaba la primera final en la historia del torneo –se juega desde 1970– a cargo de dos jugadores que participaban por primera vez.
Los primeros instantes dejaron ver el dominio impuesto por Dimitrov que cambió constantemente los ritmos del partido a través de su revés para llevar a su rival a dónde él mismo quería. Sin embargo, conforme avanzó la final, el belga optó por la misma actitud que mostró ante Federer, incrementó su ritmo de piernas y se puso más sólido desde el fondo; metió siete aces y soltó su derecha -consiguió 37 tiros ganadores-, así obligó al de Haskovo a jugar con más cautela y lo puso a dudar por unos instantes.
La manga definitiva era pura incertidumbre. Todo estaba abierto, hasta que el belga desajustó la puntería y pagó el esfuerzo que hizo para estar conectado todo el partido cediendo un quiebre. Dimitrov aprovechó, mantuvo la diferencia y se quedó con los 1.500 puntos que la ATP le otorga al campeón, al que será nuevo N°3 del mundo a partir de este lunes.
- El búlgaro se convirtió en el primer debutante en adjudicarse este torneo, después de lo hecho por el español Alex Corretja en la edición disputada en Hannover 1998, cuando venció a su compatriota Carlos Moyá en el partido decisivo.
De esta manera, el tenista de 26 años coronó la temporada más exitosa de su carrera. Al de hoy, se le suman los títulos de Brisbane, Sofía Open, y Cincinnati. “Me siento increíble ahora mismo. Sin duda es el trofeo más importante de mi carrera y sólo puedo dar gracias a mi equipo y a mi familia por haberme apoyado en este año que ha sido tan especial para todos”, declaró después de levantar el trofeo que lo acredita como Maestro.
Dimitrov alcanzó la octava corona de su carrera profesional (14 finales). Ascendió del 6° al 3° puesto del ranking masculino, siendo su mejor clasificación, y de paso hizo historia para su país al convertirse en el primer jugador búlgaro en coronarse campeón del torneo que reúne a los ocho mejores de la temporada. Cabe resaltar que contó con el plus de ganar todos sus partidos.
Goffin, por su parte, reconoció al campeón y se mostró satisfecho por lo hecho en la capital inglesa. “Me gustaría felicitar a Grigor por su gran año y el gran equipo que tiene a su alrededor. Ha sido una semana con muchas emociones, mucha fatiga y ahora mismo me siento muy cansado, pero ha sido genial vivir esta experiencia”, apuntó el que será N°7 del mundo a partir del lunes.
Para Dimitrov fue el cierre de año soñado. Goffin se quedó sin el título de Maestro, pero tendrá revancha en un semana, cuando dispute la gran final de la Copa Davis contra Francia.
[author image=”https://pbs.twimg.com/profile_images/742066367357161472/-CXpz_zc_400x400.jpg” ]Marcelo Becerra Concha (Twitter: @Marcelob11) Nací en Bogotá, tengo 22 años, soy estudiante de Comunicación Social y Periodismo en la Universidad de La Sabana. Fanático del fútbol argentino y el tenis[/author]
